Más de cuarenta anticuarios y cerca de 40.000 piezas son las cifras que definen la III Feria de Antigüedades que se celebra en Expourense entre el 21 y el 23 de octubre. Se trata de un evento organizado por la empresa NougrupFiral, especializada en la organización de ferias de antigüedades por toda España y que vuelve a Ourense por tercer año consecutivo. Esta exposición es apta para nostálgicos y propone un recorrido por la historia a través de postales, discos de vinilo, juguetes, teléfonos, máquinas de escribir, muebles, joyas, porcelanas, ropa, objetos vintage o libros, entre otros.
Tras la buena acogida de la primera edición celebrada en 2014, la organización ha vuelto a apostar por Expourense como el escaparate idóneo para que sus expositores procedentes de toda la geografía nacional e incluso de otros países como Francia, expongan sus artículos. “Esta feria será una gran oportunidad para ponerse en contacto con los anticuarios de sitios como Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Madrid, la Rioja y Francia”, señala Ángel Moix, gerente de NouGrupFiral. Este año como novedad la organización ha incorporado una sección de artesanía para dinamizar la oferta de la feria.
Por su parte, Emma González, Directora Adjunta de Expourense, agradeció a los organizadores “el haber elegido, confiado y repetido en Ourense y Expourense para la celebración de este certamen que ya forma parte del calendario ferial ourensano, y que acerca a la ciudad a numerosos curiosos, coleccionistas y caza tesoros de toda la geografía española que nos visitarán durante este fin de semana para encontrar esa pieza única y especial”.
El precio de la entrada es de 3 euros y permite acceder los tres días al recinto para dar tiempo a los visitantes a “bucear” entre los productos que ofrecerá el evento. El horario de la feria es de 17 a 21 horas el viernes 21 de octubre y de 10.30 a 21.00 h. el sábado y domingo.
Desde la organización se resalta que habrá una gran variedad de antigüedades, aunque especialmente serán objetos de pequeño tamaño y muebles. Mención aparte merecen los objetos “vintage”, que se han convertido en una moda y en un referente de la decoración y el buen gusto, por ello se prevé la presencia de expositores decorados por los profesionales que mostrarán cómo integrar estos objetos en el día a día de nuestro hogar.
Además de punto de venta, la cita también pretende servir para que los visitantes hagan negocio con aquellas cosas antiguas que tienen en sus casas. Los interesados podrán conocer el precio estimado de las antigüedades que tienen en su hogar y hacer transacciones si así les interesa. En los últimos años se ha producido una revalorización de los objetos antiguos, fenómeno que se ha acentuado con la crisis económica, por eso, para muchas personas este tipo de ferias es el lugar ideal para deshacerse de aquello que ya no quieren y, además, sacar un beneficio.