El Club Ourense Baloncesto comenzó con la ronda de presentaciones de sus nuevos jugadores que se prolongará a lo largo de la semana. Los primeros en salir a la palestra fueron el veterano Héctor Manzano y el Base Reggie Johnson.
Manzano, después de militar las últimas temporadas en el Melilla había firmado un acuerdo con el equipo EBA de la capital norteafricana para esta temporada. A pesar de haber firmado el contrato tenía una cláusula por la que podía dejar el equipo si firmaba por uno de categoría superior; y así fue como fichó por el COB.
El veterano jugador, que será el capitán del equipo, ve esta temporada como una más «para ser competitivo». En cuanto a sus nuevos compañeros y, a sabiendas, de que faltan alguno por aterrizar en el Pazo, el andaluz los ve «con mucha ilusión» además de «comprometidos».
Reggie Johnson
Por su parte, el norteameticano Reggie Johnson será, a priori, el base titular. Envergadura y potencia física le avalan para ser uno de los referentes cobistas en este curso. Johnsos se define como un jugador «destacado en transición» y que se maneja bien en el «uno contra uno» y en la intensidad.
Club
También se presentó la temporada y para ello acudió a la rueda de prensa el presidente, Camilo Álvarez. El dirigente pidió «paciencia» para un equipo muy joven pero que tiene «muchas ganas» de agradar. Álvarez afirmó que el proycto es para un plazo medio de dos o tres años, periodo en el que espera consolidar al club en el apartado económico.
Por su parte el técnico, Gonzalo García de Vitoria dijo mostrarse ilusionado con la plantilla que está confeccionando, a pesar de su juventud. Además aseguró que no llegaría en el mejor momento al inicio de Liga debido a que todavía no se han incorporado a la rutina de entrenamientos todos los jugadores fichados. En cuanto al décimo jugador par dar por cerrada la plantilla, este no llegará en los próximos días, ya que deberá ver a todos para buscar el complemento ideal. «Después de ver lo que nos de Trist miraremos lo que nos hace falta. Buscamos un cuatro y medio», aseguraba.
En cuanto a objetivos, García de Vitoria se mostró cauto y a la vez ambicioso: «Lucharemos por la salvación, pero tendremos otro objetivo y es: no ponernos límites», finalizaba.