El Sala Ourense quiere, pero no puede. Era el regreso de Kike García, junto con su siempre fiel ayudante Rubén Tizón al banquillo. Y en su estreno tuvo un duro rival, el conjunto segoviano fue de los equipos que más gustó en el Pazo, fruto de su verticalidad ofensiva y gran pegada. Desde el inicio, fuerte presión del conjunto de Ángel Zamora que puso en dificultades al conjunto de Kike García.
Dos errores defensivos pusieron el partido muy cuesta arriba con el 0-2, haciendo volver los fantasmas del pasado, en forma de errores absurdos que penalizaban en la mente de los jugadores ourensanos.
Y pudo ser peor y llegar el 0-3 tras un nuevo error, de no ser por un Pablo Quiroga, que pese al número tan alto de goles cuajo una buena actuación.
La actitud metió al Sala Ourense en el partido y en un minuto de esos locos que te deja el Pazo, apareció la figura del “boteiro” Iago Macía, gol asistencia y partido empatado. Incluso el propio Iago casi culmina la remontada con el tercero, pero se llegó al descanso con 2-2.
En la segunda parte los ourensanos salieron mejor al partido, eran sus mejores momentos y Fer lo confirmó con una finalización a la escuadra tras un pase en diagonal de Allariz, era el minuto 23, 3-2, y el partido tenía otra cara. Pena que volvieron esas pérdidas tontas, que un equipo con tanta pegada como Segosala no te perdona. En otro minuto loco los segovianos se ponen nuevamente por delante 3-4 y así entrábamos en el último cuarto de partido.
Nuevamente a remar, esta vez Álex Alonso al rescate, con un tiro exterior devolví las igualdad. Poco duró, Segosala hacía el 4-5. Cinco minutos de tregua en el marcador y a falta de 2 ́40” y con uno abajo en el marcador Kike García introduce el juego de cinco. Una acción brillante con un timing perfecto entre Álex Alonso y Raúl Rivero, donde asístia el primero y convertía el segundo, servía para hacer el empate 5-5, a falta de dos minutos.
Lo vivido a continuación fue un final de infarto, con dos equipos buscando la victoria, atacando de cinco, en su turno de la posesión. Y ambos con el mismo objetivo, buscando la victoria. Y por desgracia para los ourensanistas los que la encontraron fueron los visitantes, a falta de 16 segundos, cuando Pedro empuja un pase en diagonal a la red.
En lo negativo, otra vez se escapó una victoria más del Pazo en el último suspiro y seis goles encajados, que son muchos. En lo positivo la actitud del equipo que luchó hasta el final y lo dio todo.
La próxima semana el Sala Ourense se desplaza a Vigo. Duelo directo ante el rival que justamente le precede en la tabla, el IES Coruxo F.S.
SOURCE: Sala Ourense